BRUXISMO
El bruxismo es un trastorno funcional que consiste en el hábito inconsciente de apretar o rechinar los dientes, especialmente durante la noche. Esta actividad repetitiva provoca sobrecarga en los músculos maseteros y temporales.
El bruxismo puede estar relacionado con diversos factores, como:
- Estrés y ansiedad.
- Malas alineaciones dentales o problemas de mordida.
- Hábitos posturales inadecuados.
- Trastornos del sueño.
Los principales síntomas incluyen:
- Dolor o rigidez en la mandíbula.
- Sensibilidad dental o desgaste del esmalte.
- Dolor de cabeza, especialmente al despertar.
- Ruido o chasquido en la articulación temporomandibular.
Tratamiento
El tratamiento más eficaz y seguro es la infiltración de toxina botulínica en los músculos responsables de la contracción excesiva. Esta técnica disminuye la fuerza de contracción sin afectar a la función normal, logrando una reducción significativa del dolor, la tensión y el desgaste dental. Se trata de un procedimiento mínimamente invasivo, con resultados visibles en pocos días y una duración aproximada de 4 a 6 meses.
El objetivo es aliviar los síntomas, prevenir complicaciones a largo plazo y mejorar la calidad de vida del paciente mediante un abordaje médico personalizado.